- El encapsulado: es lo que rodea a la oblea de silicio en sí, para darle consistencia, impedir su deterioro (por ejemplo por oxidación con el aire) y permitir el enlace con los conectores externos que lo acoplarán a su zócalo o a la placa base.
- La memoria caché: una memoria ultrarrápida que emplea el micro para tener a mano ciertos datos que previsiblemente serán utilizados en las siguientes operaciones sin tener que acudir a la memoria RAM, reduciendo el tiempo de espera.
Todos los
micros “compatibles PC” desde el 486 poseen al menos la llamada caché
interna de primer nivel o L1; es decir, la que está más cerca del micro,
tanto que está encapsulada junto a él. Los micros más modernos (Pentium
III Coppermine, Athlon Thunderbird, etc.) incluyen también en su
interior otro nivel de caché, más grande aunque algo menos rápida, la
caché de segundo nivel o L2.
- El coprocesador matemático: o, más correctamente, la FPU (Floating Point Unit, Unidad de coma Flotante). Parte del micro especializada en esa clase de cálculos matemáticos; antiguamente estaba en el exterior del micro, en otro chip.
- Unidad de Control (UC), misma que está delegada a seguir cada una de las operaciones que realiza una instrucción.
- Unidad Aritmética y Lógica, que es la responsable de recibir todas las operaciones asignadas y convertirlas en datos. Estas operaciones son del tipo matemático y son respaldadas por un co-procesador matemático o como muchos lo conocen por FPU.
- El Registro, el cual es de suma importancia ya que sirve para detallar las instrucciones efectivas y fallidas. Podemos mencionar un sub-grupo en el que se encuentra el :
Registro de Instrucción (que indica la instrucción que se encuentra ejecutándose en ese instante) el
Registro Acumulador (que es donde se guarda los resultados intermedios) y el
Registro de estado (que guarda distintos tipos de avisos).